agosto 24, 2009

Amar, Depender, ó Seguir luchando!!!!



En el presente se intentara plantear un nuevo concepto que ofrece un paso más en la comprensión del amor y del hecho del sexo. Es la erótica o también llamada erotismo que da cuenta de los deseos propios de los sexos.
El célebre diosecillo alado que es Eros y que lanza flechas entre unos y otros para unir con ellas corazones separados.
La misión de Eros es unir a los que se atraen. En la mitología Eros era hijo de Poros (la abundancia) y de Penia (la penuria o escasez) que, unidos dieron como fruto ese fenómeno que en términos actuales, como entonces, solemos llamar deseo.
De esta forma se nombró a Eros en la cuna de nuestra civilización griega que luego en la lengua latina se iba a llamar Cupido y más adelante Amor que es como se generalizó en las lenguas romances de la tradición entre las cuales está el idioma castellano o español.


El término amor indica una noción genérica y designa una gran variedad de sensaciones, emociones y sentimientos. El término y concepto de Eros es más preciso y designa ese sentimiento concreto de atracción entre los sexos y no otro. El término actual es deseo erótico.
Por muchas razones, entre ellas el pudor, la terminología del Amor se ha extendido más que la de Eros. Pero, al ser más genérica y menos específica, da menos información sobre esta clase concreta de sentimientos propios de los sexos.

Se puede inferir que con la evolución Eros se vuelve Cupido, dotado de brillantes alas de oro, parecidas a los rápidos torbellinos del viento, es un dios juguetón que maliciosamente hiere con sus flechas los corazones humanos, por la que asume el aspecto de niño travieso, y se destaca por su imprevisibilidad, irracionalidad e inconstancia.

Siendo este el comienzo de toda relación amorosa, ya que primero viene la atracción en donde según la mitología griega Cupido tiene que ver en la atracción primera de dos seres, con el fin que después de este pasar al enamoramiento que se da luego de conocer a la persona, llamo conocer a la diferenciación entre ellos, pero con cosas en común que compartir.
Luego de esta parte se nos viene dado el erotismo, la parte sexual de toda relación amorosa, donde se comparte muchos momentos como la comunicación.

Según el filósofo griego Platon existe una vía ascendente para conocer el verdadero amor, para llegar a la contemplación de lo bello en sí. Se trata de un ascenso erótico que contempla los siguientes grados:

1. El amor a la belleza corporal que posee dos momentos: el amor a un cuerpo bello determinado y el amor a la belleza corpórea en general.
2. El amor a la belleza de las almas, es decir, a la belleza moral que se manifiesta en los quehaceres y en las reglas de conducta de los hombres.
3. El amor a los conocimientos, el cual trasciende la servidumbre de los seres concretos.
4. El amor a lo bello en sí, el cual es el nivel supremo de amor y que se nos revela de súbito, cuando hemos recorrido correctamente los senderos anteriores en todas sus etapas. Esta meta del amor es la Idea misma de lo bello en todo su esplendor. Ella es eterna, increada, imperecedera, estable, porque es eternamente idéntica a sí misma. De esta Belleza en sí, que además, participan todas las cosas bellas.
En términos conceptuales, podemos, pues, precisar. El erotismo es un concepto relativo a las sensaciones, emociones y sentimientos, aunque, en sí, lo más propio del mismo sean los deseos: esos deseos propios de los sexos.

En el caso de Freud el concibe el amor y el erotismo como la catexia libidinal que un sujeto establece con el objeto que satisface sus necesidades instintivas de placer y o eliminación del dolor, es decir como la fijación de un objeto determinado que se ha mostrado como placentero para un sujeto.

No obstante estas condiciones se escriben y describen con facilidad, y son sin embargo en la práctica un verdadero reto de y para el amor, siendo esta condición necesaria pero no suficiente para la integración plena y sana de la pareja.
Asumir el reto de amar e integrarse sanamente a la sexualidad es tener fe y confianza y seguridad en la otra persona, esto implica la humildad de afrontar que no tenemos el control de lo que pueda suceder. Porque amar es un riesgo que implica que el otro puede dejar de amarnos y eso dolerá pero en medio de este dolor hay que vivir un duelo que debe ser experimentado, porque hay que vivir los duelos, sentirlos y llegado el momento cerrar el ciclo y continuar con la vida para no quedarse pegado en un círculo vicioso.

agosto 10, 2009

He Nacido Hoy!!!



He nacido hoy de madrugada
Viví mi niñez esta mañana
Y sobre el medio día
Ya transitaba mi adolescencia,
Y no es que me asuste
que el tiempo se me pase tan deprisa
Sólo me inquieta un poco pensar
Que tal vez mañana
Yo sea
Demasiado Viejo
Para hacer lo que he dejado de hacer,
para hacer lo que he dejado pendiente...

agosto 06, 2009

Estoy?? o Muchas veces no quiero estar, quiero ir mas allá!!!


Porque tanto escribir, un escribir que muchas veces es sin sentido, un teclear sin sonido, un andar sin destino, porque noches grises son tan comunes, porque sentirse así en días como estos, como se siente?? Realidad difícil de explicar y aún mas compleja de entender, sera tanto ocio el que me hace pensar, no solo hacerlo para sentir, para hacer sentir, sino también para destruir, quien sabe; destruir a quien, quizá quiera destruir alguna parte de mi que por una puta razón no la encuentro, porque buscar tanto para nunca llagar, porque andar sin sentido porque pensar sin aviso a hacerlo, porque voy mas allá de lo normal en un día natural, y un día aparentemente artificial caigo de la nada y me siento como en estos momentos; Nada, quiero volar y vuelo pero muchos de los poderes los pierdo y caigo aparatosamente en un infierno desconocido y tormentoso.

Porque atormentan tantas cosas pequeñas aparentemente eternas tan incomplejas, tormentos existenciales son los que nos acechan, sera mucho pensar para tan poca edad?? sera sentir e ir mas allá de lo posible en el momento en el que no se debe estar!! porque lo posible parece imposible?? serán temores agobiados ante un cuerpo desesperado!! Porque desesperado en su tan corta vida de enamorado, porque sentir tantas cosas de los demás para luego sentirse ahogado, porque ahogarse con la energía de seres finitos y sensibles que parecen mostrarse insensibles?? PORQUE SHIT SENTIR TANTO...


Otro día Gris así me ha pasado; que desconcertado he estado con todos estos desaforados sentimientos atascados, Tantos días pensando lo que posiblemente podría ser no pensado, porque pensar lo que aparentamos pensar pero no podemos estar en lo que debemos estar por problemas constantes, pequeños y quizá atascantes!!

Caminamos donde debemos caminar pero a la vez no queremos caminar en lo que nos cuesta crear, crear tanto para luego dañar en un momento no dado, en un lugar no acercado, en momentos realmente afortunados que se logran hacer totalmente desafortunados y quizá un tanto fortuitos!!!!

agosto 04, 2009

La Existencia Precede a la Esencia!!!


Partamos por introducir la disposición del tema a nivel de... Sartre y su teoría que nos presenta su existencialismo y responde a las críticas hechas por pensadores cristianos o marxistas, especialmente a las de los comunistas a los que trata de aproximarse. Su introducción es clara aunque simple y explica lo que es el existencialismo, por lo que es accesible a gente sin formación filosófica...

La noción de sentido de la Historia que desarrolla Hegel es rechazada. En el mismo sentido nos indica que toda sociedad es una constante variable, variable a cambios constantes a situaciones diferentes?? es real una realidad sumisa y a la vez cambiante??

Para Sartre, la libertad del ser humano está tan unida a su propio devenir que nadie puede predecir, ni siquiera de modo rudimentario qué giro experimentará la Historia. Eso le lleva a rechazar el optimismo marxista.

En este mismo orden de ideas La moral Kantiana también es rechazada. Sartre toma el ejemplo de un joven ante la decisión de permanecer ocupándose de su madre o unirse a la Resistencia en Londres. En ningún caso la máxima de su acción será moral ya que tendrá necesariamente que sacrificar un "fin en sí" para reducirlo al rango de "medio": abandonar a su madre es el medio de llegar a Londres, abandonar a los resistentes en cambio es el modo de ocuparse de su madre.

Siguiendo el mismo orden de Sartre, Quisiera defender aquí el existencialismo de una serie de reproches que se le han formulado.
En primer lugar, se le ha reprochado el invitar a las gentes a permanecer en un quietismo de desesperación, porque si todas las soluciones están cerradas, habría que considerar que la acción en este mundo es totalmente imposible y desembocar finalmente en una filosofía contemplativa, lo que además, dado que la contemplación es un lujo, nos conduce a una filosofía burguesa. éstos son sobre todo los reproches de los comunistas.
Se nos ha reprochado, por otra parte, que subrayamos la ignominia humana, que mostramos en todas las cosas lo sórdido, lo turbio, lo viscoso, y que desatendemos cierto número de bellezas risueñas, el lado luminoso de la naturaleza humana; por ejemplo, según Mlle. Mercier, crítica católica, que hemos olvidado la sonrisa del niño. Los unos y los otros nos reprochaban que hemos faltado a la solidaridad humana, que consideramos que el hombre está aislado, en gran parte, además, porque partimos —dicen los comunistas— de la subjetividad pura, por lo tanto del “yo pienso” cartesiano, y por lo tanto del momento en que el hombre se capta en su soledad, lo que nos haría incapaces, en consecuencia, de volver a la solidaridad con los hombres que están fuera del yo, y que no puedo captar en el cogito.
Y del lado cristiano, se nos reprocha que negamos la realidad y la seriedad de las empresas humanas, puesto que si suprimimos los mandamientos de Dios y los valores inscritos en la eternidad, no queda más que la estricta gratuidad, pudiendo cada uno hacer lo que quiere y siendo incapaz, desde su punto de vista, de condenar los puntos de vista y los actos de los demás.
A estos diferentes reproches trato de responder hoy; por eso.
Muchos podrán extrañarse de que se hable aquí de humanismo. Trataremos de ver en qué sentido lo entendemos. En todo caso, lo que podemos decir desde el principio es que entendemos por existencialismo una doctrina que hace posible la vida humana y que, por otra parte, declara que toda verdad y toda acción implica un medio y una subjetividad humana. El reproche esencial que nos hacen, como se sabe, es que ponemos el acento en el lado malo de la vida humana. Una señora de la que me acaban de hablar, cuando por nerviosidad deja escapar una palabra vulgar, dice excusándose: creo que me estoy poniendo existencialista. En consecuencia, se asimila fealdad a existencialismo; por eso se declara que somos naturalistas; y si lo somos, resulta extraño que asustemos, que escandalicemos mucho más de lo que el naturalismo propiamente dicho asusta e indigna hoy día.

En el fondo, lo que asusta en el tema planteado y que voy a tratar de exponer ¿no es el hecho de que deja una posibilidad de elección al hombre? Para saberlo, es necesario que volvamos a examinar la cuestión en un plano estrictamente filosófico. ¿A qué se llama existencialismo?
La mayoría de los que utilizan esta palabra se sentirían muy incómodos para justificarla, porque hoy día que se ha vuelto una moda, no hay dificultad en declarar que un músico o que un pintor es existencialista. Un articulista de Clartés firma El existencialista; y en el fondo, la palabra ha tomado hoy tal amplitud y tal extensión que ya no significa absolutamente nada. Parece que, a falta de una doctrina de vanguardia análoga al superrealismo, la gente ávida de escándalo y de movimiento se dirige a esta filosofía, que, por otra parte, no les puede aportar nada en este dominio; en realidad, es la doctrina menos escandalosa, la más austera; está destinada estrictamente a los técnicos y filósofos. Sin embargo, se puede definir fácilmente. Lo que complica las cosas es que hay dos especies de existencialistas: los primeros, que son cristianos, entre los cuales yo colocaría a Jaspers y a Gabriel Marcel, de confesión católica; y, por otra parte, los existencialistas ateos, entre los cuales hay que colocar a Heidegger, y también a los existencialistas franceses y a mí mismo. Lo que tienen en común es simplemente que consideran que la existencia precede a la esencia, o, si se prefiere, que hay que partir de la subjetividad. ¿Qué significa esto a punto fijo?
Consideremos un objeto fabricado, por ejemplo un libro o un cortapapel. Este objeto ha sido fabricado por un artesano que se ha inspirado en un concepto; se ha referido al concepto de cortapapel, e igualmente a una técnica de producción previa que forma parte del concepto, y que en el fondo es una receta. Así, el cortapapel es a la vez un objeto que se produce de cierta manera y que, por otra parte, tiene una utilidad definida, y no se puede suponer un hombre que produjera un cortapapel sin saber para qué va a servir ese objeto. Diríamos entonces que en el caso del cortapapel, la esencia —es decir, el conjunto de recetas y de cualidades que permiten producirlo y definirlo — precede a la existencia; y así está determinada la presencia frente a mí de tal o cual cortapapel, de tal o cual libro. Tenemos aquí, pues, una visión técnica del mundo, en la cual se puede decir que la producción precede a la existencia.

El hombre es el único que no sólo es tal como él se concibe, sino tal como él se quiere, y como se concibe después de la existencia, como se quiere después de este impulso hacia la existencia; el hombre no es otra cosa que lo que él se hace. Éste es el primer principio del existencialismo. Es también lo que se llama la subjetividad, que se nos echa en cara bajo ese nombre. Pero ¿qué queremos decir con esto sino que el hombre tiene una dignidad mayor que la piedra o la mesa? Pues queremos decir que el hombre empieza por existir, es decir, que empieza por ser algo que se lanza hacia un porvenir, y que es consciente de proyectarse hacia el porvenir. El hombre es ante todo un proyecto que se vive subjetivamente, en lugar de ser un musgo, una podredumbre o una coliflor; nada existe previamente a este proyecto; nada hay en el cielo inteligible, y el hombre será, ante todo, lo que habrá proyectado ser. No lo que querrá ser. Pues lo que entendemos ordinariamente por querer es una decisión consciente, que para la mayoría de nosotros es posterior a lo que el hombre ha hecho de sí mismo. Yo puedo querer adherirme a un partido, escribir un libro, casarme; todo esto no es más que la manifestación de una elección más original, más espontánea que lo que se llama voluntad. Pero si verdaderamente la existencia precede a la esencia, el hombre es responsable de lo que es.


La vida a priori no tiene sentido. Antes de que ustedes vivan la vida no es nada; les corresponde a ustedes darle un sentido, y el valor no es otra cosa que este sentido que ustedes eligen.